El temido "Valle de la Muerte"

En emprendimiento hay una definición financiera para el periodo más crítico de la innovación, es cuando el proyecto consume la mayoría de los recursos y aún no se ve la esperanza de volver a reabastecerse o producir por sí mismo.

Por lejos este valle virtual es el que se lleva a la mayoría de los emprendedores, pero son aún más los que al verlo se alejan del borde de la quebrada.

Hace tres semanas iKwest fue invitado a participar de un evento corporativo que realizó Latitud 90° en San Pedro de Atacama. El lugar me sorprendió en todo momento con sus paisajes, y especialmente sus valles y quebradas. Uno de estos  fue el temido Valle de la Muerte.

Solo como un barniz de iKwest. Nosotros hacemos juegos geo-referenciados, una mezcla entre “El Código Da-Vinci y ¿Quién Quiere Ser Millonario? al aire libre a través de tecnología GPS en teléfonos móviles. Para hacer esto en lugares apartados, mi primer trabajo es levantar los puntos GPS, es decir ir al lugar e ir con el teléfono dibujando la travesía que harán los participantes de la actividad.

Durante 4 preciosas horas me tocó literalmente travesar el Valle de la Muerte acompañado de una botella de agua y 3 naranjas. Creo que esta ha sido una de las experiencias más memorables de mi vida.

El silencio, la soledad, la incertidumbre, el orgullo entre otras sensaciones embargan cada gota de agua que tomaba bajo el sol del mediodía. Varias preguntas me afloraron durante mi caminata: ¿Cuánto falta?, ¿Qué pasa si viene alguien?, ¿Qué hago acá?, ¿No había un lugar más cómodo para estar?...

En las mismas 4 horas tuve la oportunidad de responder algunas de ellas, tal vez porque he tenido años respondiendo en intentos a media, éxitos y fracasos para pasar hasta el otro lado del valle.

No puedo sintetizar mis poco articuladas sensaciones de respuesta en un párrafo, pero en una frase corta puedo decir que valió la pena y ha valido la pena la valentía de poder atravesar.

El valle pone dificultades naturales y las exacerba. Para mí como emprendedor no es el problema si entrar o no entrar en el valle, tampoco las provisiones para lograr sobrevivir, sino que es pasarlo bien con lo que estoy haciendo. Las otras sensaciones y estados de ánimo que logré disfrutar tales como el asombro, la buenas expectativas, la serenidad y la confianza en mí mismo fueron claves para darme ánimo y lograr disfrutar de cada paso que di.

El Valle de la Muerte es sin duda una experiencia única y enriquecedora. Nuestro emprendimiento durante esta semana fue premiado por la unanimidad del Directorio INNOVA-CORFO con capital semilla, sin duda agua para pasar (espero) la última pendiente antes de llegar a nuestro primer oasis.

Agradezco a todos aquellos que me han prestado su oreja, dado consejos y apoyado en este proceso. Al mismo tiempo invito a disfrutar y saborear esta exquisita experiencia al menos una vez en la vida.

Nos vemos!