martes, noviembre 02, 2010

English and network for entrepreneurs

El pasado jueves asistí al meetup de @startupchile (ver referencias: inglés - español) y tuve la suerte de conocer a muchos emprendedores chilenos, americanos, franceses e israelís. La conversación fue en todo momento en inglés.

Los emprendedores además de tener una multiformación organizacional, hoy más que nunca deben dominar otros idiomas, no solo porque hay información para ellos en internet o tal vez puedan llegar a tener un cliente, sino que la necesidad de formar redes internacionales de cooperación son críticas para el desarrollo de sus (nuestras) innovaciones.


Una innovación en muchos casos no es una creación única o tan singular que nadie más en el mundo la está pensando. En el video “When ideas have sex” (se pueden poner subtítulos en español), Matt Ridley hace una interesante “demostración” de este fenómeno.



“Ser profeta en su propia tierra” es un desafío para muchos innovadores, sobretodo porque tienen la difícil misión de lidiar con sus propias imperfecciones, historias, fracasos y paradigmas culturales. A propósito de esto último, el emprendedor es un desestabilizador de las cegueras culturales, y por tanto su laboratorio social está siempre creando crisis, meta doblemente difícil para lograr emerger con su innovación, si se considera que él también es parte de la tradición que está intentado romper. Tener una red social más amplia posibilita la oportunidad de buscar nichos más propicios para la creación y por otro lado conocer más acerca del propio paradigma.

El lenguaje nos delata, a través de él mostramos nuestra genética social. Generar una frase traducida del español no es difícil para muchas personas, pero utilizar metáforas y generar conclusiones es una tarea que toma más tiempo que un simple curso de idiomas. Los paradigmas viven en la complejidad de esto último.
Por otro lado, una red social con grados de confianza, con complicidad revolucionaria y por defecto, con muchos proyectos futuros, no vive ni subsiste en fronteras geopolíticas,  necesita expandirse o simplemente va a morir.

Espero que la iniciativa de Start-Up Chile abra aún más esta oportunidad, los felicito por esto, pero ante la desigualdad social en nuestro país, es casi imposible que alguna persona hoy, aunque haya estudiado 14 años de inglés, y provenga de una clase social baja, pueda aprovechar todas las oportunidades que Start-Up Chile está realizando. Es urgente (aunque ya está cambiando), que se fortalezca el aprendizaje cultural por sobre el aprendizaje de idiomas. No basta con enseñar traducciones o simplemente memorizar algunos términos técnicos. Necesitamos abrir nuestras fronteras, y el lenguaje es la oportunidad.

1 comentario:

Gonzalo T. dijo...

Algo algo que realmente no nos deja mejor con el Inglés... creí que el ministro tenía mejor trasmisión de ideas: http://ecorner.stanford.edu/authorMaterialInfo.html?mid=2493